29/07/2024
Las bandejas de plástico son omnipresentes en nuestra vida diaria. Las encontramos en el supermercado, protegiendo alimentos frescos, o en casa, organizando objetos. Su versatilidad es innegable, pero una vez que cumplen su función, surge una pregunta crucial: ¿dónde debemos depositarlas para que puedan ser recicladas correctamente?
La respuesta es fundamental para asegurar que estos materiales tengan una segunda vida y no terminen en vertederos, contribuyendo así a la protección de nuestro planeta. La clave está en identificar el contenedor adecuado en nuestro sistema de gestión de residuos.

- El Contenedor Amarillo: El Destino Correcto
- ¿Qué Envases Debes Depositar en el Contenedor Amarillo?
- ¿Qué NO Debes Depositar en el Contenedor Amarillo?
- Tipos de Plástico en las Bandejas y el Proceso de Reciclaje
- La Importancia de Separar Correctamente tus Envases
- Preguntas Frecuentes sobre el Reciclaje de Bandejas de Plástico
- Tabla Resumen: ¿Qué Va y Qué No Va en el Amarillo?
El Contenedor Amarillo: El Destino Correcto
En la mayoría de los sistemas de recogida selectiva de residuos urbanos, el contenedor amarillo es el lugar designado para depositar los envases ligeros. Este contenedor está específicamente pensado para albergar aquellos materiales que, una vez procesados, pueden ser reincorporados a la cadena productiva para fabricar nuevos productos.
Las bandejas de plástico, especialmente aquellas utilizadas para envasar alimentos o productos de consumo, entran dentro de esta categoría de 'envases de plástico'. Por lo tanto, si te preguntas dónde reciclar tus bandejas de plástico, la respuesta más común y segura es: en el contenedor amarillo.
¿Qué Envases Debes Depositar en el Contenedor Amarillo?
El contenedor amarillo no es exclusivamente para el plástico. Está destinado a un conjunto de materiales que comparten ciertas características y procesos de reciclaje. Conocer la lista completa te ayudará a separar tus residuos de manera más eficiente.
En el contenedor amarillo, generalmente debes depositar:
- Envases de Plástico: Aquí es donde incluimos las bandejas de plástico, como las de 'corcho blanco' (poliestireno expandido) o las bandejas rígidas de PET o PP utilizadas para frutas, verduras, carne, pescado, etc. También van las botellas y garrafas de agua, refrescos, leche, aceite, vinagre, productos de limpieza (lejía, detergente, suavizante), geles de baño, champús, cremas, etc. Los envases de yogur y mantequilla, las tapas y tapones de plástico, y los aros que unen los packs de latas también pertenecen a esta categoría.
- Bolsas de Plástico y Envoltorios: Las bolsas de la compra de los comercios, los envoltorios de plástico de alimentos (como el papel film o los plásticos que cubren bandejas), los envases tipo blíster (los que combinan plástico y cartón, separando el cartón si es posible) y las bolsas de aperitivos van en este contenedor.
- Envases Tipo Brik: Los briks de leche, zumo, vino, caldo o cualquier otro alimento líquido o semilíquido. Aunque parecen de cartón, están compuestos por varias capas (cartón, plástico y aluminio) que requieren un proceso de reciclaje específico.
- Envases Metálicos: Las latas de bebidas (refrescos, cervezas), los botes de conserva (legumbres, atún, tomate), los aerosoles de uso doméstico (laca, desodorante ambiental vacíos), las bandejas de aluminio para hornear o conservar alimentos, el papel de aluminio limpio y las chapas y tapas metálicas de botellas y tarros.
Como puedes ver, la regla general es que si es un *envase* de plástico, metal o brik, su lugar es el contenedor amarillo, incluyendo tus bandejas de plástico.
¿Qué NO Debes Depositar en el Contenedor Amarillo?
Tan importante como saber qué depositar es saber qué no pertenece al contenedor amarillo. Depositar materiales incorrectos puede contaminar todo el contenido del contenedor y dificultar o incluso impedir el proceso de reciclaje.
Materiales que NO deben ir en el contenedor amarillo incluyen:
- Envases de vidrio (van al contenedor verde).
- Papel y cartón (van al contenedor azul, excepto los envases de cartón que forman parte de un brik).
- Juguetes de plástico (suelen ser de plásticos diferentes a los de envases y deben ir a puntos limpios o contenedores específicos según el municipio).
- Objetos de plástico que no sean envases (cubos, perchas, utensilios de cocina, muebles de plástico, etc. Estos suelen ir al punto limpio o al contenedor de restos si no son voluminosos).
- Biberones y chupetes.
- Guantes de goma o látex.
- Pequeños electrodomésticos.
- Cajas de fruta de madera o plástico rígido no envase.
- Cápsulas de café (algunos municipios tienen sistemas de recogida específicos).
Es crucial entender que el contenedor amarillo es para *envases*. Un objeto hecho de plástico no es automáticamente un envase, y por lo tanto, puede no ser apto para este contenedor.
Tipos de Plástico en las Bandejas y el Proceso de Reciclaje
Las bandejas de plástico se fabrican con diversos tipos de polímeros. Los más comunes son el Polietileno (PE), a menudo usado en bandejas flexibles por su durabilidad y resistencia a la humedad, y el Polipropileno (PP), que destaca por ser resistente al calor, lo que lo hace apto para microondas en bandejas de comidas preparadas. También son habituales el PET (Tereftalato de polietileno) y el EPS (Poliestireno Expandido), conocido como 'corcho blanco', muy utilizado en bandejas para carne o pescado.
Aunque la composición del plástico puede variar, las normativas de reciclaje para el ciudadano suelen simplificarlo: si es una bandeja de *envase*, va al contenedor amarillo. En las plantas de selección, se utilizan tecnologías avanzadas (como lectores ópticos) para separar los distintos tipos de plástico, metales y briks.
Una vez separados, los materiales se prensan en fardos y se envían a plantas recicladoras. Allí, se limpian, trituran y transforman en granza o escamas, que son la materia prima secundaria para fabricar nuevos productos. Las bandejas de plástico recicladas pueden convertirse en fibra textil, mobiliario urbano, tuberías, e incluso nuevas bandejas y envases.

La Importancia de Separar Correctamente tus Envases
El simple acto de depositar tu bandeja de plástico en el contenedor amarillo correcto tiene un impacto significativo. El reciclaje de envases permite:
- Ahorrar Energía: Fabricar productos a partir de materiales reciclados consume mucha menos energía que producirlos desde cero con materias primas vírgenes.
- Reducir la Extracción de Recursos Naturales: Al reutilizar materiales, disminuye la necesidad de extraer petróleo, gas natural, minerales y talar árboles.
- Disminuir la Contaminación: Se reduce la contaminación del aire, agua y suelo asociada a la producción de materiales vírgenes y a la gestión de residuos en vertederos.
- Reducir el Volumen de Residuos: Menos residuos terminan en vertederos, prolongando su vida útil y reduciendo la necesidad de crear nuevos.
- Fomentar la Economía Circular: El reciclaje es un pilar fundamental de la economía circular, donde los materiales se mantienen en uso el mayor tiempo posible.
Cada bandeja de plástico que depositas correctamente en el contenedor amarillo contribuye a estos beneficios. Es un pequeño gesto individual con una gran repercusión colectiva.
Preguntas Frecuentes sobre el Reciclaje de Bandejas de Plástico
A pesar de las directrices generales, es común tener dudas sobre el reciclaje de ciertos materiales. Aquí respondemos algunas preguntas frecuentes sobre las bandejas de plástico:
Q: ¿Debo lavar las bandejas de plástico antes de tirarlas al contenedor amarillo?
A: Generalmente, no es necesario que estén impecables, pero es recomendable retirar los restos de comida más grandes para evitar malos olores y problemas en la planta de selección. Un enjuague ligero con agua puede ser suficiente si tienen muchos restos.
Q: ¿Qué hago con las bandejas de "corcho blanco" (EPS)?
A: Las bandejas de "corcho blanco" utilizadas como envase (por ejemplo, para carne, pescado o verduras) se consideran envases de plástico y deben depositarse en el contenedor amarillo, según las indicaciones estándar.
Q: ¿Las bandejas de plástico de colores o negras se reciclan igual?
A: Aunque históricamente algunos plásticos de colores oscuros presentaban desafíos para las máquinas de clasificación óptica, la tecnología ha mejorado significativamente. En general, si es una bandeja de *envase*, su destino es el contenedor amarillo, independientemente de su color.
Q: ¿Puedo depositar bandejas de plástico rígido que no son de comida, como las de herramientas pequeñas?
A: No. El contenedor amarillo es para *envases*. Las bandejas que no son envases, aunque sean de plástico, deben ir a puntos limpios o al contenedor de restos, dependiendo de su material y tamaño, a menos que tu municipio indique lo contrario.
Q: ¿Qué pasa si deposito algo incorrecto en el contenedor amarillo?
A: Depositar materiales que no son envases (como juguetes, utensilios de cocina, o envases de vidrio) puede contaminar el lote de reciclaje. Esto puede hacer que parte o la totalidad de los residuos de ese contenedor no puedan ser reciclados y terminen en el vertedero. Por eso, es vital separar correctamente.
Tabla Resumen: ¿Qué Va y Qué No Va en el Amarillo?
| SÍ va en el Contenedor Amarillo | NO va en el Contenedor Amarillo |
|---|---|
| Bandejas de plástico (envases) | Envases de vidrio |
| Botellas y garrafas de plástico | Papel y cartón (excepto briks) |
| Envases de yogur y mantequilla | Juguetes de plástico |
| Bolsas de plástico de compra | Objetos de plástico no envases (cubos, perchas) |
| Envoltorios y film de plástico | Utensilios de cocina de plástico |
| Briks de leche, zumo, etc. | Pequeños electrodomésticos |
| Latas de bebidas y conservas | Guantes de goma |
| Aerosoles vacíos | Cajas de fruta (madera o plástico no envase) |
| Bandejas y papel de aluminio (limpio) | Biberones y chupetes |
| Tapas y chapas metálicas | Cápsulas de café (en general) |
Esta tabla resume visualmente los puntos clave para ayudarte a recordar dónde depositar tus residuos.
En conclusión, la próxima vez que tengas una bandeja de plástico de un envase en tus manos, ya sabes su destino ideal para el reciclaje: el contenedor amarillo. Este simple acto, repetido por millones de personas, es fundamental para avanzar hacia una gestión de residuos más sostenible y proteger nuestro entorno. Separar correctamente es el primer paso y el más importante en la cadena del reciclaje.
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